Nuevo proceso constructivo de viaductos con cimbra autolanzable y nueva secuencia evolutiva

Resumen

Durante los últimos años se han venido realizando viaductos con cimbra autolanzable y una nueva secuencia evolutiva de la sección transversal. Esta nueva secuencia evolutiva consiste en alcanzar un esquema autoportante que permita el avance de la cimbra con la sección aún no finalizada. El nuevo proceso constructivo presenta una serie inconvenientes constructivos, cuya problemática y solución se estudia en la presente tesis. Estos inconvenientes son: - la necesidad de controlar la flexión transversal del núcleo autoportante, - la necesidad de realizar dos tandas de pretensado por vano y - el inconveniente de dejar esperas de gran longitud entre en núcleo autoportante y la segunda fase de hormigonado transversal. La problemática asociada a los dos primeros inconvenientes se ha analizado mediante modelos de elementos finitos, tanto de vigas (estudio en 2D) como de shells (estudio en 3D), mientras que la problemática asociada al tercer inconveniente se ha estudiado mediante la realización de ensayos de losas y paneles para determinar el comportamiento y la idoneidad de esperas entre fases de hormigonado de tipo compacto o loop joint. Los resultados obtenidos en los modelos numéricos estudian la posibilidad de mejorar el actual proceso constructivo mediante la implementación de dos tipos diferentes de tesado que permiten realizar una sola sesión de tesado por vano, vigilando especialmente la apertura de fisura y las sobrecompresiones en el hormigón. Asimismo, los resultados de los ensayos confirman la seguridad en el empleo de armaduras de espera de tipo compacto o loop joint entre fases de hormigonado diferentes, no sólo para su empleo en viaductos, sino para su utilización en cualquier otra obra de ingeniería civil o edificación en que haya varias fases de hormigonado. Por último, conviene destacar que con las nuevas mejoras introducidas, se consigue realizar la construcción de los viaductos en un plazo de menos de una semana por vano, eludiendo la presencia de actividades críticas durante su realización y todo ello sin necesidad de establecer un tercer turno de trabajo en la obra, con el consiguiente ahorro de costes derivado de tal necesidad.