Gestión del agua marina desalinizada en parcela:adaptación de la fertirrigación y uso conjunto con otras fuentes de agua

  1. V. Martínez-Alvarez 1
  2. J. F. Maestre-Valero 1
  3. B. Martin-Gorriz 1
  4. B. Gallego Elvira 1
  1. 1 Universidad Politécnica de Cartagena
    info

    Universidad Politécnica de Cartagena

    Cartagena, España

    ROR https://ror.org/02k5kx966

Libro:
X Congreso Ibérico de Agroingeniería: Libro de actas
  1. F. Javier García-Ramos (ed. lit.)
  2. Pablo Martín-Ramos (ed. lit.)

Editorial: Universidad de Zaragoza

ISBN: 978-84-16723-79-9

Año de publicación: 2019

Páginas: 785-794

Congreso: Congreso Ibérico de Agroingeniería y Ciencias Hortícolas (10. 2019. Zaragoza)

Tipo: Aportación congreso

Resumen

El riego agrícola con Agua Marina Desalinizada (AMD) se ha desarrollado en la última década en el sureste español e Israel. El AMD. Desde el punto de vista agronómico, el AMD se caracteriza por su escasa mineralización y el desequilibrio en su composición, ya que tiene alta concentración de Na+, Cl- y B3+, y baja concentración en Ca2+, Mg2+ y SO42-. Esta singularidad, si no es considerada en el manejo del riego y la fertirrigación, puede llevar a pérdidas en la producción y la calidad de la cosecha. Para evitar estos problemas hay que hacer una adecuada gestión del AMD en parcela, especialmente orientada a adecuar su composición a la necesidad de nutrientes de los cultivos, siendo necesario adaptar los programas de fertirrigación y utilizar posibles mezclas con otras fuentes de agua que puedan aportar Ca2+, Mg2+ y SO42-. En este trabajo se comparan las necesidades de fertirrigación de varios cultivos característicos del sureste español cultivos, bajo sus condiciones de cultivo en el Campo de Cartagena, considerando tres posibles escenarios de suministro de agua: 100% del riego con agua del trasvase Tajo-Segura, 100% del riego con AMD, y mezcla al 50% de ambas fuentes de agua. Los resultados del estudio ponen de manifiesto que la incorporación de AMD al riego hace necesario adaptar los programas de fertirrigación con el fin de compensar su baja mineralización, especialmente en cultivos sin suelo (en sustrato e hidropónico). El coste de esta adaptación es relativamente pequeño en comparación con el incremento de coste del agua de riego. Para algunos cultivos, la suma de ambos incrementos puede hacer peligrar su viabilidad económica, ya que incrementa notablemente los costes anuales de operación.