Adaptacion del tomate a la salinidad mediante pretratamiento de semillas y plantulas

Laburpena

El cultivo del tomate tiene una gran importancia socioeconómica en las zonas semiáridas mediterráneas, donde frecuentemente se utilizan para el riego aguas con contenidos elevados en sales solubles, lo que puede llegar a provocar importantes reducciones en la producción. El objetivo de este trabajo ha sido determinar la utilidad o eficacia de los pretratamientos, aplicados tanto a nivel de semilla como de plántula, como vía para aumentar la tolerancia a la salinidad del tomate. Para abordar este objetivo, se ha procedido en primer lugar a la selección de los diferentes métodos de pretratamiento capaces de inducir el máximo efecto positivo sobre el desarrollo de las plantas a corto plazo, para lo que ha sido necesario determinar a que estado de desarrollo la planta muestra la mayor capacidad de adaptación, así como los niveles de estrés y el tiempo de aplicación de los mismos. Las estrategias seleccionadas fueron el pretratamiento salino, a nivel de semillas, y la adaptación progresiva y choque hídrico a nivel de plántula. Finalmente, se comprobó si el efecto positivo inducido por las diferentes estrategias de adaptación se mantenía a largo plazo y, por consiguiente, se reflejaba en la producción. Los resultados obtenidos ponen de manifiesto que se pueden conseguir importantes incrementos en la producción mediante la aplicación de pretratamientos, aunque la respuesta parece ser específica del genotipo, puesto que las edstratagias que incrementan la producción son diferentes para cada genotipo. Es interesante señalar que la adaptación induce cambios fisiologícos que se mantienen durante todo el ciclo vegetativo de la planta, por lo que se pueden utilizar criterios fisiológicos, como la relación Na+/K+, para seleccionar a mas corto plazo los genotipos que muestren una respuesta positiva a la adaptación.